Es marzo de 2020 y se está viviendo una sensación muy extraña por la epidemia, ahora ya mundial, del virus que se originó en Wuhan, China. El coronavirus. Y lo introduzco así porque quiero volver a este artículo dentro de 5 años y poder decir: "Ah, sí, aquello que pasó"... Y que todos podamos "reírnos", con cierto alivio, de lo que fue. Una anécdota que se repetirá en todos y cada uno de los idiomas de la población terrestre.
Porque a día de hoy lo del coronavirus es preocupante. Se está poniendo serio y está generando angustia a nivel global. Bueno, que ya no se dice Coronavirus. Ahora se le llama Covid-19, que las ventas de productos como la cerveza marca Corona caigan en picado. Solo por la mala coincidencia de su nombre. 🤷🏻♂️
Y ojalá ese fuese el peor de los males. En algunos países están cerrando los aeropuertos y colegios. También se están cancelando todos los eventos importantes como, en el caso de España, el Mobile World Congress de Barcelona o Las Fallas de Valencia. Algunos supermercados están ya vacíos, y hay una ardua lucha por conseguir mascarillas y papel higiénico. El gel antiséptico en Barcelona, me cuentan, también está agotado.
Desde el otro lado del planeta
Sigo en Bali. Estoy a > 12.500 km de mi casa, y aún me queda un mes más aquí. Hoy, día 12 de marzo, se habla de que el virus se está extendiendo por España y eso pone al país en el #6 del ranking mundial con más casos detectados ?. En las últimas semanas se decía que había infectados, pero no llegaban a la decena. En los últimos días los casos se han elevado a 40, después a 200 y después a 2.500. La expansión es exponencial y del mismo modo crece la incertidumbre.
- ¿Podré coger el avión de vuelta a casa?
- ¿Debería irme antes de que cierren los aeropuertos?
- ¿Debería pasar más tiempo en Bali y aprovechar este aislamiento?
...Al fin y al cabo, las condiciones aquí son buenas: el clima es caliente y tengo mucha energía. Me siento extraordinariamente bien físicamente. Más fuerte que en toda mi vida. Pero...por otro lado, si me encuentra el virus estando aquí será muy fastidiado estar tan lejos de familia y amigos, además de la poca seguridad que me da la sanidad en este lugar. Sin las garantías, además, de entender bien que mi seguro médico sea el adecuado para recibir las atenciones y con ello el miedo de quedar abandonado a mi suerte.
Cuando tu madre te envía esto...
David, lo del coronavirus está muy serio....están pensando ya el sábado en decidir cerrar todos los aeropuertos, están pensando ya en Madrid en cerrar todos los comercios y abrir solo los de primera necesidad como supermercados y farmacias....lo demás todo cerrado. Puede que vayan a suspender todos los vuelos y estaría bien que vayas barajando la idea de volver ya y quedarte aquí o en casa unos días sin salir. Siento tenerte que decir esto pero lo están pintando fatal.
Lo primero que piensas es que es una madre, y que es normal que se preocupe. Pero el segundo pensamiento inmediatamente después es que algo en el mundo va mal. Muy mal. Y empiezas a ver asomar la sombra de algo que se aproxima.
Mi pareja, amigos y familia fueron escribiéndome cosas parecidas, cada vez con más frecuencia.
Cómo se vive en Canggu
Bali está tranquila. No hay alarmas ni protocolos. Sí hay personas con mascarillas y parece que se toman medidas extra en cuanto a indicaciones de lavado de manos y desinfección, a nivel individual. Pero todo funciona con normalidad y nada está parado. No existe ninguna sensación de que existe el virus hasta que hablas con amigos o entras en las redes sociales. El hecho de no tener TV y no estar bombardeado por los medios también ayuda. A fecha de hoy aquí la gente está informada pero tranquila: frecuenta piscinas y playas, restaurantes, lugares de trabajo y todo está en paz. Los supermercados están tan llenos de artículos como siempre (o tan vacíos como siempre, según se mire, que son pequeños y no tienen mucho donde escoger. Pero no hay cambios).
Aún así, los que estamos aquí sabemos que es algo a nivel mundial y que nada nos garantiza estar a salvo. Algunos miembros de mi grupo están pensando en volver a sus países de origen mientras otros están renovando su visado para poder estar más tiempo aquí, por si acaso fuese necesario. Canggu es, además, un foco de turistas y veo llegar todos los días a gente de otros países. Si ha llegado a tantos lugares, es fácil predecir que más pronto que tarde va a llegar el virus aquí también. Y en ese momento no sé qué va a pasar. Cómo va a ser el aislamiento en este sitio. Cuánto va a tener que durar y si va a ser fácil poder volver a casa en el tiempo previsto.
UPDATE: 28 de marzo
A día viernes 27 de marzo, un momento en el que todos los vuelos están siendo cancelados, la embajada Española en Indonesia anuncia un vuelo para París al día siguiente (28 de marzo) para que los Europeos puedan volver. Los vuelos regulares están por las nubes y son escasos. Es una buena oportunidad para volver. No estoy convencido, pero estoy obligado a tomar una decisión en pocas horas. En las últimas semanas los números están creciendo en Indonesia y podría desatarse la epidemia en este lugar. La incertidumbre pasa por pensar si este sitio está lo suficientemente preparado para algo así y, en cualquier caso, cuántos meses debería pasar aquí sin poder volver a casa. Así que al final creo mejor decisión recortar el viaje diez días y coger un avión antes de lo previsto.
Al fin y al cabo, las personas se están yendo de la isla. No somos muchos los turistas, pues los accesos a la isla están siendo vetados y muchas areas restringidas, por lo que hay gente que se va pero no gente que viene. Los comercios llevan cerrados desde hace unos días (por seguridad y por falta de clientela). Mis compañeros ya no están. El curso está ya terminado y aprobado, guardo el certificado en mi maleta a modo de trofeo. Parece que ya no hay más música en este concierto y que ya hemos bailado tanto como podíamos bailar.
Estoy volviendo a casa.